Hemos colocado
una puerta para tener la posibilidad de separar salón y cocina. La puerta es de apertura central, compuesta por dos hojas fijas y dos hojas móviles correderas que se deslizan en sentidos opuestos, ofreciendo un amplio paso libre en su zona central. La perfilería
es de cromo brillo y el vidrio de seguridad, (templado) que al ser mate
nos permite separar las dos zonas sin perder la luz natural.